Bienvenido 2014

Cualquier persona con un mínimo indice de sensatez sabe que la introducción de tasas e impuestos sólo puede aceptable si parte de una legitimación democrática y en este caso concreto no se da. Ya que los 11 millones de votos que recibió el PP, entre ellos el mío, no le da derecho a sacrificar a la clase media, hemos votado un programa electoral, no unas siglas, ni una tendencia política ya sea de izquierda o derecha y está haciendo al contrario de lo prometido

El gobierno de Mariano Rajoy ha subido nada más y nada menos que 40 veces los impuestos en los dos años de legislatura, incluyendo eliminación de deducciones, revisiones y nuevos gravámenes y no cuento la implantación de los copagos en la sanidad y la universidad. Esto sería muy criticable en cualquier gobierno, pero máxime en uno del PP, que siempre ha mantenido un discurso a favor de la libertad individual y la economía productiva y en contra del alza de la presión fiscal.

Rajoy y el Ministro de Hacienda Montoro, formo parte de un gobierno que bajo los impuestos en varias reformas sucesivas en la etapa de Aznar, la "gracia" es que Mariano y Montoro el tertuliano de intereconomía, hizo su campaña en una defensa a ultranza de que no subiría los impuestos.

Este gobierno no sólo ha incumplido y traicionado sus promesas sino que además ha dejado descolocado a la izquierda más radical y retrograda del programa electoral de IU.

Los españoles que sobrepasan un determinado nivel de renta pagan tanto como en determinados regímenes, teniendo en cuenta que el tipo máximo asciende ya al 52%, más los recargos que impone cada comunidad Autónoma.

La mentira del Ejecutivo para justificar estas subidas es que era la única alternativa para hacer frente  a la herencia del peor presidente de la historia Zapatero, que dejó el déficit por encima del 9% y un país al borde de la intervención, por parte de la UE. Lo segundo es cierto, el rescate era inminente, pero lo primero es ciertamente un engaño por la sencilla razón de que otros gobiernos han actuado de forma muy distinta en situaciones parecidas. Esperanza Aguirre, una mujer integra y valiosa desde el punto de vista de muchos ciudadanos, propuso hace unos meses un drástico recorte del sector público como alternativa, pero esto significaría dejar a muchos amiguetes en la calle y el mismo Mario Draghi ha firmado que es mejor reducir gastos que aumentar los impuestos.

Si analizamos los datos  de la reducción del déficit en 2012 se redujo gracias a la subida de impuestos, que generó un aumento de la recaudación de 11.200 millones de euros. Cuando el PP ganó las elecciones en 2011, el consumo de los hogares crecía un 0,5%. Ahora cae por debajo del 1,5%, en buena medida por la fuerte presión fiscal.

Pero el gobierno sigue la misma hoja de ruta: seguir un tercer año más con aquella subida temporal por dos años del IRPF, nuevas tasas, mientras que se niega a tocar el inmenso aparato burocrático del Estado. Ello sólo puede afectar negativamente al crecimiento económico y a la creación de puestos de trabajo y como consecuencia directa, seguir creando más paro, miseria y hambre.

En España trabajar es cada día más difícil, los sueldos han bajado de media un 12%, a los pensionistas le suben un 0,25%, impuestos, copagos y tasas varias. La verdad es que para demasiadas personas el recibir la factura de luz (subida próxima al 10%)  y agua, se esta convirtiéndose en una esquela de difunto cada vez que llega la dichosa cartita a casa.

En Málaga, el recibo del IBI a valor de la revisión catastral que realizó el Ayuntamiento en el año 2008, cuando las viviendas ha bajado casi un 50% en muchos casos y de revisión a la baja nada de nada, este año 2013 ha subido el recibo una media de 100 euros y para el próximo bienvenido 2014 un 2,9% más, factura de agua por habitante, el 75% del recibo plagado de tasas varias: recargo de inducción, recargo por tener el contador dentro de la terraza etc..etc..) e impuestos por todas partes. Pero claro pongo el tema del Ayuntamiento que es lo más próximo al ciudadano, pero la Junta de Andalucía expolia hasta las cuentas en bancos o cajas de los moribundos  y a partir de hay comenzamos a hablar y no acabar, ya que los socialistas en general y Zapatero y sus ministros en particular, ha significado la ruina de nuestro país.

Por tanto, no hay que prestarse a estas reglas de juego, una casta parasitaria de mediocres políticos que padecemos los ciudadanos, un corrupto poder judicial controlado por PP, PSOE, IU, CIU,PNV que pactan el reparto del Consejo General del Poder Judicial para controlar a los jueces y asegurarse la impunidad de toda esta pandilla de ladrones del Congreso, Senado, Comunidades Autónomas, Ayuntamientos y Diputaciones "Un circo" que no debemos tolerar. Urnas vacías en las próximas elecciones.