Animalito boreal

En la selva esmeralda de mi ciudad se observa cada día una marabunta inagotable de mascotas unas controladas y otras sueltas viviendo la vída con sus respectivos dueños.Unos tirando del animalito con arte y oficio y con una gran dosis de estilo que le hace parecer que esta practicado "esqui acuático", claro todo ello por la fuerza que ejerce el cam, ya que normalmente son mas voluminosos que el cuidador(despues de crísis más), otros detras de él haciendo la media maratón o los tres mil metros lisos en pista descubierta corriendo y persiguiendo al scoobi doo (lindo perrito), a traves de la frondosa selva corta del parque por la desobediencia de este.Y como aquí lo importante es que todos participemos pues ¡ala!, los demás tambien nos engachamos al circulo de los excelentes deportistas modalidad ave (tren de alta velocidad), realizando ejersicio en pista americana como antaño en el servicio militar o saltos de altura para no llevarnos consigo los excrementos en las suelas de los zapatos.Aunque afortunadamente una minoría de ¿personas?, tienen una actitud incivica  y una mentalidad retrograda hacia los demás del que ¡lo recoja el que venga detrás!, es totalmente desacertada  porque al final todos nosotros con nuestros impuestos tenemos que pagar la alta factura económica y estética de estos lamentables comportamientos.
Y para gustos colores, existen tantos animales para llevartelos colgado de la chepa los doces meses del año, aunque como siempre el oscar caníno se lo lleva "el perrito",habría que estar mentalizado que cuando regalamos o compramos un animal  lleva una etiqueta adjunta de: responsabilidad y cuidados diarios ¡no es un adorno decorativo para la casa!,eso si va muy bien para relacionarte con el vecino-a, que nunca te ofreció ni el saludo.
Hace unos días tuve una experiencia con una persona de mediana edad (cuarenta años aproximadamente), que me enseño las fotos de sus preciosos hijos  ¡cuál fué mi sorpresa!,cuando ví la foto (dos perros), espero que la brújula la tenga perdida ella, porque sino tengo claro que el desorientado es el que os a comentado esta anécdota, por tanto (no se deben de personificar a las mascotas), cada uno ocupa su  espacio.
Tus derechos acaban donde empiezan  los mios ¡recoje la caca y no me hagas perder parte de mi vida limpiandome mis zapatos nuevos.-